Mitos o Realidad sobre la mollera

Conoce qué es la mollera,  si en verdad puede caerse y qué hacer al respecto!

Cuando la gente se refiere a la mollera, habla de un parte den la cabeza del bebé que se siente suave al tacto porque los huesos del cráneo aún no han cerrado por completo. Cuando el bebé nace, el cráneo aún no está completamente unido. El cráneo está formado por muchos huesos. Hay 7 huesos en el cráneo y 14 en el área facial que se unen para formar una cavidad ósea sólida que protege y sostiene al cerebro. Las áreas donde los huesos se unen se llaman suturas. Al momento del nacimiento, los huesos no están unidos de una manera firme, para ayudar al bebé a atravesar el canal de parto. Las suturas gradualmente se endurecen, conforme el bebé crece. El espacio donde se unen 2 suturas forma un "punto blando" cubierto de membranas denominado fontanela.

Las fontanelas permiten el crecimiento del cerebro y el cráneo durante el primer año de vida del bebé. Existen varias fontanelas en el cráneo de un recién nacido, pero la más conocida es la de la parte superior de la cabeza, comúnmente llamada mollera, la cual cierra entre los 7 y los 19 meses de vida.

Las fontanelas deben sentirse firmes y muy ligeramente curvadas hacia adentro al tacto, pues a pesar de la abertura, la mollera está recubierta con una gruesa capa fibrosa que impide que el cerebro resulte dañado, pues cuida que la presión no se concentre dentro del tejido cerebral. Sin embargo es cierto que la mollera pude hundirse, pero esto es señal de que el bebé no tiene suficiente líquido en el cuerpo; es decir, que está deshidratado.

Por otro lado, una mollera abombada puede representar el aumento de la presión dentro del cráneo. Es importante que sepas que durante el día pueden presentarse cambios, esto es normal y no debe preocuparte. Sin embargo sí hay señales de alerta.

Una mollera hundida puede ser una emergencia médica y el médico la debe revisar de inmediato de que presentes los siguientes síntomas del niño, tales como:

Tiene otros malestares o síntomas el bebé

Ha estado el bebé enfermo, especialmente con vómitos, diarrea o sudor excesivo

El bebé experimenta sed

El bebé se muestra despierto 

Están los ojos del bebé resecos y llora con frecuencia

Lo que no debes hacer:

Si el bebé presenta la mollera hundida, es común que se aconseje a la mamá que tome al bebé de los pies y colgarlo con la cabeza hacia abajo, darle unas palmadas en las plantas. NO LO HAGAS, no sirve de nada y lastimas a tu bebé.

Otro de los mitos es que se debe meter el dedo a la boca y empujar el paladar y para que con estas acciones se levante la mollera. ES INÚTIL, cuando la fontanela se encuentra hundida significa que el bebé está deshidratado y se debe acudir al médico de inmediato.

Tampoco intentes:

1.- Soplar la mollera del bebé para evitar que se prive durante el llanto. No sirve de nada, se trata de un mito. 

2.- Masajear la mollera. No es recomendable pues puede provocar que la fontanela se cierre antes de tiempo.

con toda esta información procuramos siempre darte la mejor opción para el cuidado de tu bebe y no es que estemos en contra de las parteras y de lo que las amistades o familiares te aconsejen simplemente que como mamás queremos siempre ver a nuestros pequeñitos muy bien de salud así que lo mejor es que acudas con tu médico a las revisiones mensuales; él medirá el cráneo de tu bebé y constatará que cierre adecuadamente. Si notas algún cambio es necesario que estés en contacto con el pediatra y evita prácticas riesgosas.

problemas para darle sus medicinas??

Administrar un medicamento durante los primeros meses de vida de tu bebé puede ser algo difícil; sin embargo, aquí te damos unos prácticos consejos para que te sea más sencillo.

Es importante que desde el primer mes de tu bebé conozcas cómo darle sus medicinas, para que estés prevenida ante cualquier inconveniente. Por esta razón, te decimos cómo poner un supositorio y cómo utilizar una pipeta

Cómo ponerle un supositorio, paso a paso

• Háblale con suavidad y ternura.
• Coloca el supositorio con anticipación en un sitio fresco.
• Recuesta a tu bebé boca arriba y flexiona sus rodillas y mantelo en esa posición.
• Introduce el supositorio y comienza a juntar sus pompis, para evitar que lo expulse.

Consejo rápido. No se te olvide leer las instrucciones del supositorio para asegurarte de que lo coloques en el sentido correcto.

Cómo usar la pipeta o jeringa  

1. Recuesta al bebé boca arriba.
2. Llena la pipeta o jeringa graduada, al introducirla directamente en la botella del medicamento bebible.
3. Coloca la pipeta en la boca del bebé, pero no la introduzcas por completo, ya que le podrías provocar vómito.
4. Oprime la pipeta para dejar caer el contenido. El bebé lo succionará ya que tiene este reflejo.
5. Lava la pipeta o jeringa antes de guardarla.

espero que estos consejos te sea útil no olvides dar una dosis de besos y apapachos :D 

NOTA: Rocio

AUTOR: mybbyyo

¿Es normal la caída de cabello luego del parto?

Una de las consultas más frecuentes de las madres luego del parto  está relacionada con la caída de pelo.  Durante el puerperio el cabello suele debilitarse, estar más seco que de costumbre y caerse más fácilmente.

La buena noticia es que esto  es absolutamente normal. La mayoría de las mujeres pierden pelo en los meses posteriores al parto pero todo vuelve a la normalidad unos meses después.
Durante el embarazo, todo el cuerpo se altera  por la acción de las hormonas, y el pelo no es una excepción. El cabello de la mujer sufre cambios debido a que las hormonas placentarias provocan un aumento de la secreción sebácea del cuero cabelludo. Por tanto, generalmente el cabello mejora significativamente.  Incluso notarás que tu pelo también se cae menos durante el embarazo, ya que el estrógeno circulante mantiene el cabello en fase de crecimiento.
Dos o tres meses después de parto, se observa una caída masiva de todo ese pelo que no se ha perdido durante el embarazo. Si lo normal es que se caigan de 50 a 100 cabellos al día, en esta fase se cae mucho más.
Tras el parto, las hormonas se reequilibran y el cabello que había estado detenido en la fase de crecimiento durante el embarazo empieza a caerse de forma bastante repentina y brusca.
No es cierto, que la lactancia materna sea la responsable de la caída de pelo después del parto, ya que esto también se produce en mujeres que no amamantan.

¿Puedo hacer algo para evitar la caída del cabello?

La caída de pelo en el postparto no debe ser motivo de preocupación.   No obstante, hay ciertos consejos que puede seguir para cuidar tu pelo en esta etapa.

La alimentación es muy importante, ya que el bulbo capilar se nutre de las vitaminas y minerales que recibe a través del torrente sanguíneo. Lo que debes hacer es llevar una alimentación variada y saludable y no sólo por fortalecer el pelo, sino por tu salud y la de tu bebé.
Aumenta el consumo de frutas y verduras, lácteos y cereales. Presta especial atención a los alimentos ricos en vitamina B (avena, soja, levadura de cerveza, pollo, pescado, aguacates), ácidos grasos Omega 3 presentes en los pescados azules, nueces y en algunos vegetales, así como en minerales como el calcio, hierro, yodo y zinc (carne, cordero, germen de trigo, calabaza, maní, ostras, garbanzos, espinacas, etc).
Además, en la fase de mayor caída evita los tratamientos capilares agresivos, el uso excesivo de secador y planchas, y utiliza un champú suave con ph neutro.  Existen complementos nutricionales para fortalecer el pelo y aportarle densidad y volumen, así como tratamientos específicos para la caída del pelo, pero ante la duda consulta con el médico ya que  algunos no son compatibles con  la lactancia.

Recuerda que si notas que la caída se extiende durante un año o más, sería recomendable que acudas a un especialista.